lingam“En numerosos templos de la India, vemos representado el símbolo de Shiva, el lingam, una vara en posición vertical sobre un soporte horizontal. Aquéllos que comentan este símbolo, a
menudo sólo se detienen en la imagen de la vara erguida que representa el falo, el órgano de la generación, el principio masculino. En realidad, hay que tener también presente la base
horizontal que representa el principio femenino. El principio masculino, es el espíritu que trabaja sobre el principio femenino, la materia. Toda la creación no es más que el
resultado del trabajo de estos dos principios, y es por ello que en la práctica espiritual tampoco deben ser considerados por separado.
En la India, todavía se encuentran hombres y mujeres que llevan pintado un punto rojo en el entrecejo. Es ahí, en el entrecejo que se sitúa Ajna chacra que es el centro de la clarividencia,
de la visión espiritual. Pero aquél que se concentra en este chacra, que es receptivo, femenino, debe también concentrarse en el chacra Sahasrara, situado en la parte superior del cráneo, que es emisor, masculino. La unión de estos dos principios, se convierte en un lingam viviente”
Omraam Mikhaël Aïvanhov