A MI MANERA.

¿Y a ti…te dice Dios algo, te comenta alguna cuestión?

A mí no, pero indirectamente me hace sentir de una manera muy especial todo aquello que vivo y veo, lo que siento del momento y mucho es.

Veo la llegada de nuevo día, como va cambiando el negro manto del cielo que pierde su color oscuro por el claro azul del alba en una amalgama de colores del amanecer que radiante llega.

El canto de los mirlos que parecen que en sus trinos loan al Señor. Las tórtolas en un cansino reclamo de hembra anuncian el nuevo día de primavera que llega exultante de luz y nuevas energías de un sol que será fuerte en su máximo cénit.

La diversidad de flores, arbustos y árboles, que de aquí y de allá parecen surgir por el dominio de la mano del hombre que ha ido sembrando caminos forzados de una civilización que parece avanzar para bien o para mal.

Esas primeras mariposas llamadas de “la col” que van y vienen en un vuelo que parece atolondrado, las primeras golondrinas anunciando el calor en su ir y venir dando el anuncio de la comenzada primavera.

A más altura y buscando otros destinos, se escuchan las gaviotas que paréceme que gritan “GRACIAS SEÑOR”.

Son maneras de sentir y de dar gracias, son maneras de vivir y conformarse con dicha creación, que aunque la tenemos olvidada, a mí me llega porque es SU conversación dirigida a este indigno ser que por debilidades de su carácter, le conformó en el espíritu sensible, donde la naturaleza me cuenta y me dice del CREADOR.

Y es que siendo diferente, soy igual que el sentir de cada cual es particular porque cada uno es como es siendo de naturaleza igual, que la materia es la misma, mas no así el espíritu que a cada uno dio sus dones y así has de expresar.

Por eso aquel refrán que dice: “Nada es verdad ni es mentira, todo es según el cristal con que se mira”